Durante 6 sesiones de trabajo, fue posible vivir la experiencia de primera mano aprendiendo de cada uno de los pintores invitados. Instrucciones detalladas para “soltar la mano y “coger confianza” con el pincel, consejos para articular la mano, el brazo y el resto del cuerpo a la hora de pintar letras, y anécdotas sobre el oficio de los pintores de avisos.
Instalaciones de Casa la Silueta – Proyecto Relámpago